¿Quieres saber cómo actuar ante una negligencia veterinaria? Los perros son una parte esencial en la vida de millones de personas alrededor del mundo, por lo que no es extraño que una de nuestras mayores preocupaciones sea mantener a nuestra mascota siempre sana y feliz.

Por desgracia, los animales también pueden tener problemas de salud, y necesitan visitar al veterinario con regularidad para poder recuperarse… algo que no siempre se consigue, a causa de la gravedad de las enfermedades o, lo que es peor, un error humano o negligencia veterinaria.

Si te preocupa el bienestar de tu mascota, a lo largo de este artículo te mostramos cómo actuar ante una negligencia veterinaria, qué proceso has de seguir para demandar y qué tipo de indemnización puedes recibir.

Denunciar una negligencia veterinaria

Antes de nada, ¿qué se entiende por negligencia veterinaria? Una negligencia veterinaria hace referencia al conjunto de situaciones en las que los profesionales veterinarios no proporcionan el nivel adecuado de atención o cuidado al animal, dando como resultado un daño o perjuicio para la salud del mismo.

Para ilustrar el concepto de forma más clara, aquí tienes algunas causas de mala praxis o negligencia veterinaria:

• Diagnóstico incorrecto o tardío
• Tratamiento inadecuado
• Errores quirúrgicos
• Supervisión y seguimiento deficientes
• Ineficacias en la atención de emergencias
• Información escasa o errónea al propietario

Si crees que el tratamiento de tu perro puede haberse visto perjudicado por algunos de los errores expuestos anteriormente, vale la pena revisar detenidamente el caso y determinar si se trata de un legítimo caso de negligencia veterinaria.

A continuación, te explicamos cómo debes proceder.

Cómo demandar a un veterinario por negligencia

Antes de emprender acciones legales contra el veterinario o la clínica, es necesario asegurarse de que realmente existe una negligencia.

Para ello, el primer paso será revisar detenidamente toda la documentación proporcionada por el veterinario (registros médicos, facturas, recomendaciones y tratamientos proporcionados, etc.), comunicar abiertamente tu preocupación a los profesionales y pedir explicaciones detalladas, e incluso solicitar una segunda opinión.

En caso de que todas las pruebas apunten a una negligencia veterinaria legítima, existe la alternativa de llegar a un acuerdo extrajudicial con la clínica o el veterinario y exigirles una indemnización. Pero si estos no se hacen responsables del error, aún es posible reclamar por la vía judicial.

Sin embargo, antes de poner el asunto en manos de los juzgados, puedes presentar tu caso ante el Colegio de Veterinarios correspondiente a tu ciudad para recibir asesoramiento o ejercer presión ante los profesionales que atendieron a tu mascota.

Cómo denunciar una negligencia veterinaria por vía judicial

Si crees que tu mascota ha sido víctima de una negligencia veterinaria y no has conseguido llegar a un acuerdo con los veterinarios, puedes recurrir de forma legal.

A continuación te explicamos cómo hacerlo paso por paso:

1. Reúne todas las pruebas posibles: antes de iniciar el proceso, prepara todas las pruebas y documentos proporcionados por el veterinario o el Colegio de Veterinarios, como registros médicos, facturas, recetas de medicamentos, testimonios de testigos y cualquier otra información relevante.

2. Consulta con un abogado: buscar la cobertura de un abogado especializado en negligencias veterinarias es esencial para hacer este proceso mucho más llevadero. Este podrá asesorarte sobre la viabilidad de tu reclamación, además de preparar tu caso y defenderlo ante un juez.

3. Notificación previa: en algunas jurisdicciones, es posible que se requiera enviar una notificación previa al veterinario o a su aseguradora antes de presentar una demanda formal. Tu abogado te asesorará sobre si esto es necesario en tu caso.

4. Presentación de demanda: cuando tu abogado haya preparado todos los documentos legales necesarios, deberá constituir una demanda formal y presentarla ante el tribunal competente, detallando tus alegaciones de negligencia y los daños sufridos.

5. Seguimiento del proceso legal: a partir de este punto, el proceso legal puede variar según la jurisdicción y la complejidad del caso. Por lo que puede incluir etapas como el descubrimiento (recolección de pruebas y testimonios), negociaciones fuera de la corte, mediaciones, actos de conciliación o, en última instancia, un juicio.

¿Cuál es la indemnización por negligencia veterinaria?

Ahora que ya sabes cómo actuar ante una negligencia veterinaria, cabe indicar qué tipo de indemnización podrías recibir tras haber ganado el caso.

Como ocurre en cualquier proceso legal, la cuantía de la indemnización depende de varios factores. Por ejemplo, la gravedad de la negligencia, el daño causado a la mascota y las leyes específicas de la jurisdicción concreta. Es decir, que no existe una cantidad fija o estándar para la indemnización en estos casos.

Sin embargo, sí que podemos revisar algunos conceptos que influyen a la hora de concretar una cantidad:

1. Costos médicos: incluyen los gastos asumidos por el cliente a la hora de tratar a su mascota (precio de las consultas, tratamientos, cirugías, medicamentos…)

2. Gastos adicionales: si la mascota no ha fallecido, pero necesita tratamientos o cuidados continuos para recuperarse, es posible que también se incluyan dichos costes médicos a futuro.

3. Daño emocional: hace referencia a la compensación económica por el dolor emocional y el sufrimiento causado por la negligencia veterinaria. Por ejemplo, los gastos en concepto de ayuda o terapia psicológica.

4. Gastos legales: la indemnización puede incluir los gastos legales relacionados con el caso (abogados, peritos, etc.)

Y con esto, hemos llegado al final del artículo. Esperamos que te haya resultado interesante, pero sobre todo, útil para saber cómo actuar ante una negligencia veterinaria y obtener una compensación adecuada por los perjuicios ocasionados a tu mascota y tu bienestar emocional.

En el blog de Las Almenas encontrarás muchos posts útiles para mantener la buena salud de tu mascota. Como por ejemplo, el artículo que te presentamos a continuación, donde te indicamos los 5 peligros más comunes para los perros. ¡La prevención es lo primero!